Llegó el momento. Nueve jóvenes se acercan al micrófono y sin muchos preámbulos afirman que vienen a contarnos lo que les pasa cada vez que llueve. Son estudiantes de la EESN°91 de Virrey del Pino. Su barrio se llama Los Álamos y está ubicado en el kilómetro 32 de la Ruta 3 y delimitado por el arroyo Morales y el Río Matanza.

A principios de año habían decidido investigar las causas que hacen que el barrio se inunde al menos tres veces al año. Casi como si el destino estuviera escrito, en octubre, sufrieron la inundación más grande de su historia.

Ausencia del sistema de recolección de basura, deficiencias en la atención primaria de la salud y escasas políticas de planificación urbana por parte del Estado es lo que subyace en cada una de las entrevistas. Sin embargo, pese a todo lo que falta, cada uno de las personas entrevistadas deja ver las estrategias de solidaridad que la comunidad implementa ante cada temporal.

El barrio es parte constitutiva de su identidad. Nacieron en él, van a la escuela, al club y allí se conocieron. Por eso sueñan con cambiar su realidad. No creen en los destinos, saben que el futuro no es algo dado y por eso no se resignan.

Lourdes, Samantha, José, Moisés, Maximiliano, Alex, Franco, Jhon, Ariana y sus docentes nunca se plantearon la posibilidad de no venir a Chapadmalal. Para cerrar su intervención afirman que llegaron hasta acá no solo para contar lo que les pasó sino también porque poder decir lo que les pasa es el primer paso para dejar de imaginar el futuro y empezar a construirlo.

#estoeschapa